Hamaca Nicaragua talla L Crudo

¿La mejor hamaca con barra del mundo?

Nicaragua comenzó a fabricar para los EE. UU. hamacas con barra, ya que es el tipo de hamaca que más domina en el norte de este continente. Desde hace algunos años, también se observa una fuerte demanda en Europa. Los nicaragüenses fabrican las mejores hamacas con barra del mundo. ¿Por qué? En primer lugar, porque los brazos de esta hamaca son muy largos y esto tiene el efecto de anular el punto de equilibrio. Además, esta longitud hace que la fricción sobre la barra de madera sea menor, ya que hay menos presión cuando los ángulos son más bajos. Por lo tanto, la hamaca dura más tiempo. Además, la superficie para acostarse está hecha de un algodón extremadamente suave y de una malla suelta y elástica que termina cediendo ligeramente para un confort más agradable. Esta hamaca se puede lavar a mano en una bañera.

La hamaca con barra – Un saber hacer que viene del corazón de Nicaragua

Allí, entre volcanes y selvas tropicales, Nicaragua no solo ofrece paisajes impresionantes. También ofrece manos. Miles de manos, a menudo jóvenes, hábiles, a veces curtidas por el sol, que tejen pacientemente el alma de este país: la artesanía.
En los coloridos mercados de León, Granada o Masaya, las hamacas artesanales cuentan una historia, la de familias que perpetúan un arte ancestral en un país donde la educación sigue siendo un lujo y donde el trabajo manual se convierte en un camino, por elección o por necesidad.

Entre estos tesoros, esta hamaca con barra es una pieza única. No se parece a ninguna otra. Su diseño, típico de la hamaca en T, solo se elabora en ciertas regiones de Nicaragua, donde cada etapa de su creación es un trabajo colectivo, casi sagrado.

Todo comienza en un telar, donde nace el cuerpo de la hamaca, sólido y flexible a la vez. Mientras tanto, en los pueblos cercanos, son a menudo las mujeres quienes preparan a mano los flecos (esos hermosos bordes que bailan con el viento, en sus patios, a la sombra de los árboles).
Una vez que las piezas están listas, se llevan al taller: allí se ensamblan las barras de madera, cuidadosamente lijadas, las decoraciones, los brazos de la hamaca, los aros... Cada hamaca de madera se convierte entonces en una obra de arte, fruto de muchas manos y de un mismo espíritu.

Hecha a mano

Esta hamaca de madera con barra está completamente hecha a mano, sin ningún consumo de energía eléctrica, con una sola excepción: el aro de suspensión, proveniente del reciclaje de latas, se funde gracias a un pequeño horno eléctrico. Un proceso artesanal y responsable hasta en los más mínimos detalles. Se necesitan de 4 a 6 personas para fabricar este modelo.